MI TALLER: 30 Preparación del Pitcher


Cualquier día de estos su manager le dirá: «Te toca lanzar», aunque usted no lo haya hecho nunca, ni haya practicado recientemente la posición de lanzador. Estas improvisaciones son frecuentes en el Baseball menor, ya que los managers buscan saber quién tiene las condiciones para ser lanzador, y tarde o temprano tendrá que probar a sus muchachos en este rol. Lo lógico es que no sea tan repentino y dramático y se les haya enseñado en las practicas las técnicas de lanzar, para que no sea una sorpresa el día que tengan que realizar la prueba.

Cuando se consulta la bibliografía al respecto se le da una preponderancia a la posición del lanzador que asusta a cualquier muchacho: «Lanzar es el 75% del juego a la defensiva», «Con el pitcher se inician todas las jugadas», «Es junto al catcher el que está más cerca del equipo contrario». Son sólo frases que describen una situación deportiva, que por demás a mí me resulta: emocionante, retadora y, ¿por qué no?, divertida.

En el Baseball menor el número de lanzamientos por juego y por semana están limitados por reglamento. Para un adulto la preparación del lanzador debe tener en el horizonte la posibilidad de realizar 200 lanzamientos en un juego. Eso incluye calentamiento, pelotas en juego y lanzamientos a las bases. Es un horizonte pero no un límite, pudieran ser 250 o más.

Existiendo una tendencia, muy limitada hasta ahora, de eliminar el wind-up, la resistencia de las piernas del pitcher debe ser óptima. Algunos viejos repiten que: «el brazo del pitcher está en sus piernas». Con esto quieren decir que debe tener la resistencia para realizar esos 200 wind-ups, que básicamente se trata de hacer un paso «forzado» mientras el brazo hace su trabajo.

Así que el entrenamiento N° 1 del lanzador debe ser fortalecer sus piernas: trotar, correr y pesas o aparatos deben ser frecuentes, si no diarios.

Las escaleras, con mucho cuidado, son un gimnasio excelente para todos y en especial para lanzadores. Aquí una serie de ejercicios que se pueden ir variando y agregando otros. Sólo correr no es suficiente.

Mentalmente ya lo dijimos. Lanzar es: … ¡divertido! Es un acto de confianza en uno mismo, en un intento de dominar al rival. Y si el rival logra conectar un hit, hay que confiar en el equipo y esperar que realice su trabajo y apoyar con nuestras asistencias.

Una buena serie de ejercicios para realizar con mucho cuidado, recuerda haber calentado y estirado antes. Realizarlos con un compañero es mejor que con aparatos.

Siempre le decía a los relevistas, sobre todo en situaciones apremiantes: «Disfruta de tus lanzamientos, haz los mejores que puedas, a ver si logras dominar al equipo contrario». Esa es la actitud mental que ha de privar en el lanzador en lugar de pensar que se está en centro del diamante, que el público te está mirando y quiere que falles.

En otras publicaciones hablamos de los tipos de lanzamientos que puede realizar un pitcher. Hay más de los que uno se imagina, pero no es necesario conocerlos todos, mucho menos aprenderlos. Acepte los que le enseñe su coach de pitcheo y aprenda por lo menos aparte de la «recta» y el «cambio», dos lanzamientos «quebrados» o en curva, usualmente la curva propiamente dicha y el slider. Otras opciones: screwball (en desuso), recta cortada (es una recta que se mueve, o sea, no es recta), bola de tenedor (se agarra con tres dedos), bola de nudillos (especial para pitchers sin velocidad y con catchers muy buenos), etc. En el siguiente gráfico hay un ejemplo de varios lanzamientos, algunos con otros nombres distintos a los que ya dimos:

Los lanzamientos se desarrollan mediante un agarre y una forma de hacer el wind up (Paso del pitcher para lanzar + movimiento del brazo y cuerpo)

Los lanzamientos «quebrados» deben aprenderse cuando ya los brazos están bien desarrollados en el sentido de prevenir lesiones, quizás después de los 15 años. Y se ha de comenzar con los más simples: el slider y la curva.

Para aquellos que practican con un amigo y todavía no tienen coach, les presento los consejos de Armando Galarraga, pitcher venezolano de MLB.

Un lanzador especialista en abrir juegos debe aprender a lanzar de dos formas:

  1. De frente al home, la cual se usa cuando no hay corredores en bases o las bases están llenas.
  2. De lado, que se usa cuando hay corredores en base y pudieran salir a realizar un robo de base. Esta posición para lanzar es la permitida para lanzar a las bases sin cometer un Balk (acción engañosa del lanzador para sorprender al corredor. Al hacerla, el jugador es sancionado por los árbitros, concediendo la siguiente base al corredor.)
Presentación frontal del lanzador, mira hacia el home de frente.

A veces vemos a los chicos practicar pitcheos sólo de frente, y logran realizarlos con buen dominio de la zona y velocidad. Cuando les toca hacerlo de lado (en juego y no lo han practicado) pierden control y velocidad. Si un lanzador va a usar las dos formas debe practicar ambas y practicar todo su repertorio: bola rápida, cambio, curva, slider, etc. Hay una opción para especialistas en relevos (relevistas) lanzar siempre de lado.

Presentación de lado del pitcher, mira hacia el home de lado.

En el siguiente vídeo se explica ambas formas de lanzar y al final simula las tres acciones más usuales del lanzador: lanzar de frente, lanzar de lado y lanzar a primera.

Hagamos un resumen de lo que puede y debe considerar:

  • Realizará por juego, entre calentamiento y pelotas en juego, fácilmente 250 lanzamientos. Por ello debe preparase para realizar su trabajo con un buen acondicionamiento de:
    • Brazos: obviamente será su herramienta principal, debe cuidarlo y entrenar bien evitando lesiones.
    • Piernas: deben soportar entre dos y tres horas de windups de alto esfuerzo (> 250 veces).
  • Debe aprender a realizar varios tipos de lanzamiento: recta o bola rápida, cambio y dos o más lanzamientos «quebrados».
  • Debe aprender a lanzar de frente (sin corredores en base) y de lado (cuidando que los corredores no tomen bases adicionales mientras lanza).

De más está decir que debe ser inteligente en sus decisiones, aprender a dominar a los bateadores, recordar qué lanzamientos le hacen más daño a cada bateador y disfrutar del juego, por más difícil que este se le esté poniendo.

Contrario a la corriente actual, recomiendo que practique bateo «siempre». Sólo es un jugador de Baseball más, y no sabrá cuando lo van a necesitar al campo. Adicionalmente, el pitcher es el 5to infielder: un lanzador debe practicar fildeo y lanzar a las bases acertadamente.

Entre las cosas más difíciles que podemos ver en un pitcher es que lance a las dos manos (Switch-Pitcher). Entrenar para esta destreza significa doble trabajo para cualquiera.

Si tienes algún punto que desees aclarar o profundizar, no dudes en consultar a través de: Mi Contacto

Volver a El Taller